Por Carlos Alberto Quiroga
LA PAZ (Reuters) - El presidente boliviano, Evo Morales, habría ganado con contundencia el referendo revocatorio del domingo, aunque el resultado difícilmente sacaría al país de la crisis que se disparó por el rechazo opositor a las ambiciones socialistas del mandatario.
Según escrutinios rápidos y sondeos a boca de urna de cadenas de televisión, más de un 60 por ciento de los electores bolivianos habría votado a favor de la continuidad en el poder del líder indígena, en tanto que la mayoría de los gobernadores regionales de la oposición también fue ratificada.
Sin embargo, habrían rechazado la permanencia de dos prefectos opositores, entre ellos el del departamento de Cochabamba, quien adelantó que no abandonará poder.
Morales, que asumió en enero del 2006, había convocado al referendo para aceptar un desafío de la oposición, que ha bloqueado su plan de instaurar una Constitución socialista para dar más poder a la mayoría indígena y fortalecer el proceso de nacionalización de la economía.
Según la corte electoral, para perder, Morales debería recibir en contra la misma cantidad de votos con la que ganó las elecciones de finales del 2005, un 53,7 por ciento.
Pero sólo hace falta el 50 por ciento más uno de los sufragios para cesar a un prefecto.
"Pese a las provocaciones permanentes, el comportamiento de pueblo boliviano ha sido totalmente exitoso hoy (domingo) en este referendo revocatorio en Bolivia," dijo Morales, apenas cerradas las urnas, en una rueda de prensa en la ciudad Cochabamba, en la región central del país homónima.
Convencidos de que el Gobierno quiere convertir a Bolivia en una nueva Cuba, los partidos críticos de Morales, mayormente conservadores, habían adelantado que seguirían resistiendo tras la consulta a través de los procesos de autonomía que iniciaron en cuatro de los siete departamentos que administran. Continuación...